Mi hija entrena en la academia Husky’s, antes estaba en la Selección de basquetbol en una escuela muy reconocida de Querétaro, pasó ahí toda la primaria y secundaria, posteriormente empezamos a buscar donde continuar con el deporte que tanto le gusta y nos recomendaron Husky’s, lleva escasamente un año entrenando (por la pandemia se detuvo). Los nueve años de la escuela donde estaba no se compara con lo que ha aprendido en este año, aprendió a correr como debe ser, sabe medir velocidad, ahora trabaja todas las posiciones del juego, aprendió a tirar en todas las posiciones, ahora es segura de sí misma en todos los aspectos, estoy muy agradecida en estar en esta academia que nos ha recibido con los brazos abiertos y nos sentimos como en familia.

Para mi entrenar con Husky’s es algo muy especial ya que ahí empecé y sigo aprendiendo, hace casi un año me daba miedo el balón y no tenía confianza para hacer las cosas, sin embargo, me han enseñado a tener confianza y eso no solo me ha ayudado en el básquet, sino que también en mi vida diaria. Yo a Husky’s no lo considero solo un club, somos una familia unida que siempre se apoya.

Husky´s me ha ayudado muchísimo a mejorar mi nivel de juego, a crecer como jugadora y como persona. Gracias a todo lo que me han enseñado he podido jugar olimpiada, estar con la selección de Querétaro, jugar CONADEMS y actualmente estar participando como jugadora en la liga ABE.  Realmente es un ambiente muy agradable y para mí un buen lugar para aprender y mejorar en este deporte.

Mi experiencia en el club Husky’s ha sido satisfactoria, ver el desarrollo y la técnica aunado al juego en conjunto que ha adquirido mi hija en este club me llena de orgullo. El básquetbol la ha hecho más sociable y decidida. Ha participado en torneos de diferentes niveles en donde ha salido victoriosa y en otros ha conocido la derrota. A pesar de ello, disfruto mucho cada juego, viendo como aplica lo aprendido en los entrenamientos. Gracias Husky’s, vamos por nuevos retos.

Llevo entrenando con Husky’s un poco más de 2 años, cuando empecé solo sabía tirar y botar el balón, pero poco a poco fui aprendiendo movimientos que no imaginaba poder hacer, también empecé a tener condición física, los entrenamientos eran mucha técnica personal y no solo mejoré mi juego también empecé a conocer gente y a tener amigas, lo cual hacía que los entrenamientos fueran divertidos, al igual que los partidos. Se que aún me faltan cosas por mejorar, pero con Husky’s sé que lo lograré. Si tienen la oportunidad de entrar, lo recomiendo muchooooo.

Nosotros llegamos a Husky’s porque mi hija tenía interés por practicar básquet, unos meses después empezamos con mi hijo de 5 años en ese entonces, el necesitaba practicar un deporte donde ayudara a desarrollar su lenguaje, su motricidad, ser más sociable y la recomendación entre otros deportes fue básquet el cual mi hijo decidió practicar y poco después empecé a practicarlo con ellos pues su coach me platicó que este era un deporte que podíamos entrenar en familia, la experiencia ha sido gratificante pues la complicidad con mi hija adolescente ha crecido, yo he logrado tener más confianza en participar en algunos casos y en general como familia nos ha hecho tener una vida más saludable.